Lo que no regresa.

Y justo en el pórtico que era más pequeño que un hombre promedio me detuve para pensar si realmente merecía llorar lo perdido...

Solo lo extraño por que no esta aquí, nunca tuve la delicadeza o el esmero de pensar en cuan afortunado era por tenerlo.

Creo que es momento de caminar en la lluvia para simular sufrimiento, tal ves en un ambiente adecuado pueda engañarme lo suficiente para sentir la perdida.

Ya que en el fondo solo es un día mas.

Mau-Zen.